Cuidar a una persona con discapacidad es difícil y requiere de muchas energías. Es especialmente complicado si tiene la movilidad muy limitada: la cama se ha convertido el lugar donde pasa la mayor parte del día y queremos que esté lo más cómoda posible.
Ha llegado el momento de comprar una cama articulada, de esas que se suben y bajan solas gracias a un motor eléctrico, pero hay tantos modelos que no te aclaras mucho. Para eso hemos hecho esta clasificación. Así podrás elegir las características que quieres que tenga o no tu cama.
Antes de adquirir tu cama…
¿Por qué adquirir una cama articulada?
Estas camas eléctricas son cómodas para el usuario y para el cuidador porque facilita atender a un familiar enfermo o con discapacidad.
Veamos un caso concreto. Si la persona a nuestro cuidado está mucho tiempo en cama y apenas se mueve, empezará a desarrollar úlceras en la piel (escaras); es una de las consecuencias de la inmovilidad.
Las camas articuladas mueven a la persona encamada pulsando un botón y favorecen los cambios posturales: el usuario estará muchísimo más cómoda y el cuidador no tendrá que emplear la fuerza para los cambios de postura.
¿Qué es una cama articulada?
Una cama articulada es un somier cuyas partes se suben y se bajan con un mando. Van conectadas a la corriente eléctrica. Normalmente, las camas tienen 4 paneles (llamados planos) de los que se elevan tres de ellos: el respaldo, las rodillas y los pies.
Las camas articuladas eléctricas han dejado de ser simplemente camas de hospital o de residencia y cada vez es más frecuente encontrarlas en domicilios.
El colchón
Antes de adquirir una tienes que saber que no todos los colchones valen. Para empezar tienes que mirar las medidas, porque el somier de la cama eléctrica tiene unas partes metálicas que sostienen el colchón cuando la cama se está articulando; asegúrate de que las medidas del colchón corresponden con la cama.
También hay otro asunto: las camas articuladas no admiten colchones de muelles. Quizás ha llegado el momento de renovar tu antiguo colchón. ¿Has pensado en los colchones antiescaras? Hemos hecho un artículo contándote qué colchón es el mejor para el descanso de una persona convaleciente.
Las medidas
Normalmente, las medidas de una cama articulada son 190x90cm, aunque hay fabricantes que hacen otras medidas. ¿Y si duermo en pareja? Te aconsejamos que compres dos camas articuladas por separado y las unas: te saldrá mucho más económico.
Revisa también si nuestra cama soportará el peso del usuario; suelen soportar hasta los 140kg. Si lo supera, escoge camas XXL, también llamadas bariátricas.
El carro elevador
Cuando vayamos a comprar la cama, nos harán la siguiente pregunta: “¿la quiere con o sin carro elevador?” Guarda tu cara de póker porque te vamos a explicar lo que es.
Como su nombre indica, es un sistema de elevación: un motor se encarga de subir o bajar la cama. ¿Para qué sirve? La cama baja para que la persona con problemas de movilidad o Alzheimer pueda entrar en ella más fácilmente. Pero este mecanismo también está pensado para el cuidador, porque sube la cama hasta la altura ideal para que pueda atender a la persona encamada sin tener que inclinar la espalda, lo que le evita futuras lesiones.
Hay tres tipos de carro:
De tijera: un motor despliega o encoge su estructura en forma de X.
Telescópica: tiene dos motores, a cada extremo de la cama y eleva las cuatro patas a la vez.
Trendelemburg: esta palabreja quiere decir que tu cama se inclinará horizontalmente, hacia el cabecero o el piecero. Estas posturas favorecen el riego de la sangre hacia los pies o la cabeza.
El carro aumenta el precio final de la cama eléctrica, evidentemente. Puede que ahora no lo necesites, pero puede que en un futuro sí. Por lo tanto, piensa en ello como una inversión de futuro.
El somier
Es una cuestión importante porque afectará al precio final y a las características de la cama. Veamos los materiales:
De madera: el más básico. Flexible y cómodo. La madera es porosa y puede coger olores y manchas, además de ser más difícil de limpiar. Pero si no tienes necesidades especiales, te aconsejamos este.
De acero: más rígidos que los anteriores, aporta mayor firmeza, pero no coge olores ni se mancha.
Somier fenólico: combina lo mejor de los dos, ya que es flexible y no quedan restos de manchas ni de olor. Sin embargo, tiene un precio más elevado.
Las patas
¿Patas con o sin ruedas? Si no vas a mover la cama de su posición, es probable que la quieras con las patas fijas. Algunas permiten regular la altura de la cama de forma sencilla.
En lugares como residencias u hospitales, prefieren que la cama tenga ruedas. En este caso sólo queda decidir si tendrá frenos individuales en cada una de las patas o un sistema centralizado lo activará en todas al mismo tiempo.
Los accesorios
Cuando le eches el ojo a los modelos de cama, consulta si los accesorios están incluidos. La mayoría de ellos se pueden añadir a posteriori y sin necesidad de herramientas.
Cabecero y piecero: más que nada se incluyen por estética. Están disponibles en maderas de calidad y otros materiales. Podemos escoger la forma y el color. Algunas camas eléctricas los traen incorporados.
Barandillas para evitar que la persona encamada se caiga. Se pliegan para entrar y salir. ¿Vas a necesitar una o dos?
Trapecio incorporador: queda suspendido sobre el cuerpo, para alcanzarlo con las manos. Una gran ayuda a la hora de entrar en la cama o incorporarse.
Portagoteros: muy útil para la medicación intravenosa.
El montaje
Ya, por fin, has decidido comprarla y te llega a casa. ¡Dios mío, está desmontada! No entres en pánico. Nosotros ofrecemos servicios de montaje, pero siempre puedes leer las instrucciones o visitar nuestro canal de Youtube donde hemos subido varios vídeos explicando cómo se montan.
Insistimos, no te preocupes. Los fabricantes han tenido en cuenta que hay que montarlas en casa y lo han puesto lo más fácil posible. Ni siquiera necesitarás herramientas.
Quizás quieras una cama articulada por el simple hecho de que son las más cómodas. Sí, lo son: para leer, para ver la tele, para tomarte el desayuno… Debemos desterrar esa imagen en la cabeza de que son camas de hospitales para gente que está enferma, porque no es así. Cada vez más personas sin discapacidad optan por ellas.
Distancias de seguridad conforme a IEC 60601-2-52
Si eliges incorporar barandillas a tu cama tienes que tener en cuenta que estas son completamente seguras. Para saber esto comprueba los siguientes aspectos para elegir la barandilla adecuada.
– La distancia mínima desde el colchón a la barandilla superior tiene que ser mayor a 220mm.
– La barandilla tiene que tener una longitud mayor del 50% del somier de la cama.
– El montaje de la barandilla debe asegurar que la distancia del cabecero a la barandilla sea menor a 60mm y en la parte del piecero mayor que 318mm o inferior a 60mm.
– No debe existir huecos entre las barras de las barandillas superiores a 120mm.
Estas barandillas plegables cumplen todos estas condiciones.
