En el post de hoy os hablamos de los tensiómetros, sobre cómo usarlos y todos los tipos que puedes encontrarte en el mercado.
Si quieres hacerte con uno, pero tienes dudas para elegir el adecuado, este artículo te interesa. Toma nota y descubre cómo funciona un tensiómetro para que puedas medir la presión arterial de forma eficaz desde el primer día.
¿Qué es un tensiómetro y para qué sirve?
Un tensiómetro (enlace a categoría) es un dispositivo para medir la presión arterial, que es como se conoce a la presión que la sangre ejerce sobre las paredes de las arterias. Esta presión es más alta cuando el corazón late y más baja “entre latidos”.
Cuando la presión es demasiado alta, hay riesgo de que se endurezcan las arterias y son más propensos los depósitos de colesterol. Sin embargo, cuando la presión es demasiado baja, pueden producirse mareos o desmayos.
¿Cuándo la presión es normal? Se considera una presión normal cuando se encuentra entre 120/80. Esto puede ser diferente según la persona y sus patologías.
Tipos de tensiómetros
Según su forma de uso, en el mercado encontramos dos tipos de tensiómetros: manual o digital.
Aunque, ya casi siempre solemos ver tensiómetros digitales, aún hay profesionales y personas que miden su presión sanguínea en casa con tensiómetros manuales.
Tensiómetro digital
Los tensiómetros digitales se componen de un monitor, un brazalete y el tubo de conexión.
Su uso es muy sencillo y no es necesario tener fuerza ni agilidad en las manos, ya que se infla de manera automática.
Tensiómetro manual
Los tensiómetros manuales son los primeros que aparecieron en el mercado y están compuestos por un brazalete, un indicador de presión, una bomba de inflado y la manguera para el flujo de aire.
¿Cómo se utiliza el tensiómetro?
Un tensiómetro es un dispositivo muy fácil de usar. Existen tensiómetros más profesionales, indicados para el uso en hospitales, y tensiómetros para usar en casa. Ambos tipos se usan de forma muy similar. ¡Te lo contamos a continuación!
Primero, debemos conocer que un tensiómetro mide dos valores diferentes:
- La presión diastólica: Es aquella que existe cuando el corazón se encuentra en reposo (entre latidos).
- La presión sistólica: Esta presión es la que aparece cuando el corazón bombea sangre (latido).
Pasos para usar un tensiómetro
- Colocar el brazalete en el brazo izquierdo (si eres diestro) o en el brazo derecho (si eres zurdo) dos o tres centímetros por encima de la fosa cubital (donde doblamos el codo). Colócate sentado, con la espalda recta y pon el codo y el antebrazo sobre la mesa. El brazo no debe tener ropa.
- Tira del brazalete para que quede bien ajustado al brazo. Debes ajustarlo hasta que solo quepan dos dedos por debajo de la zona superior del brazalete. Asegúrate que no te pellizcas cuando se infle.
- Este paso será diferente si estamos usando un tensiómetro manual o uno digital:
Tensiómetro manual
- Asegúrate de que el disco del estetoscopio esté boca-abajo, situado bajo el brazalete.
- Colócate en las orejas los auriculares del estetoscopio y sujeta el medidor en la palma de la mano izquierda, en la misma en la que tienes el brazalete.
- Infla rápidamente apretando la bomba, hasta que la presión se encuentre 30 puntos por encima de tu presión sistólica frecuente.
- Deja de apretar la bomba y gira hacia ti la perilla de la bomba, en sentido contrario a las agujas del reloj. Notarás que el aire sale lentamente.
- Mientras escuchas tus latidos, deja que la presión se reduzca 2 mm por segundo.
- Ahora solo tienes que consultar la presión que indica cuando escuches un latido y esa será tu presión sistólica. De la misma manera, consulta el resultado que indica cuando no escuches latido, esta será tu presión diastólica.
Tensiómetro digital
- Enciende el aparato y activa el brazalete. Normalmente, al encender el dispositivo, el brazalete se infla solo automáticamente.
- Una vez que el brazalete esté hinchado, expulsará aire lentamente.
- Ya solo tienes que mirar el monitor para conocer tu presión sistólica y diastólica.
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